Lo que se dejó el sismo del 85
- Alfredo Fonseca
- 19 sept 2017
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La Ciudad de México aprendió del sismo de 1985 y hoy está más preparada. Fue el 19 de septiembre de 1985, a las 7:19 de la mañana, cuando se produjo un sismo de magnitud de 8.1 en escala de Richter que provocó una devastación en la Ciudad de México.

Dos minutos bastaron para que miles de casas quedaran vacías, con las estructuras dañadas, dobladas o de plano desquebrajadas.
El temblor dejó miles de pérdidas humanas, heridos, desaparecidos, edificios caídos por todos lados; fue un despertar trágico para miles de mexicanos.
Los días posteriores a la pérdida son los más duros, a consecuencia del temblor del 85 se reportaron numerosas “epidemias” de depresión, psicosis colectiva, estrés postraumático y actitudes violentamente; también “a medida que transcurrían las semanas se presentaron otras manifestaciones psicológicas, que consistían fundamentalmente en estados de desilusión, apatía e incertidumbre ante el futuro”.
Pero, por otro lado, el sismo del 85 despertó el México de la solidaridad, de la fraternidad y una nación más humana, al tiempo que llamó a apoyar con unidad y eficacia a quienes padecen los efectos de los desastres naturales que han afectado el país.

Han pasado 32 años y ninguna de las personas que les tocó vivir ese sismo lo olvida. Desde entonces los habitantes de la capital "cambiaron la mentalidad", aunque es necesario que no bajen la guardia. "Hay que estar entrenado, alerta cuando escuchas la alarma, no pensar que es un juego y salir".
Redacción.
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